¿Es mejor que salga a pagar o a devolver la declaración de la Renta? Así influye la inflación

VIRGINIA LÓPEZ ESPLÁ

Cerca de 22 millones de contribuyentes deben presentar este año la declaración de la Renta. Este año se presentan los tributos correspondientes al 2022, un año marcado por la inestabilidad económica derivada de la guerra en Ucrania y aumento de los precios de la energía y los alimentos. En este 2023 la situación de incertidumbre continúa y la inflación repercute en el impacto de la declaración.

Por lo general, el que la declaración de la Renta salga a devolver siempre se toma como una noticia positiva. La explicación a esta situación es que el contribuyente ha adelantado a lo largo del año parte de sus ingresos mensuales y ahora le corresponde a la administración devolverle ese esfuerzo. En caso contrario, la cuota diferencial es positiva, o lo que es lo mismo, el contribuyente deberá pagar a la Agencia Tributaria.

En que la declaración salga a pagar o a devolver no depende de la inflación. El secretario general de los Técnicos de Hacienda (Gestha), José María Mollinedo, subraya que lo más importante en la declaración en «la cuota líquida del IRPF, la carga tributaria del impuesto que se calcula en función de las rentas y la situación familiar de la persona».

En definitiva, es «la cuota resultante de la autoliquidación» y nunca pagará lo mismo una persona soltera que otra con cargas familiares. No obstante, como destaca Mollinedo, «el efecto acumulado de la inflación hace que la capacidad de compra sea menor».

Así, la inflación sí afecta a la declaración de la Renta. El valor del dinero no es el mismo ahora que en 2022 y con lo que devuelve la Agencia Tributaria el contribuyente ve mermada su capacidad efectiva de compra por lo que ha adelantado y luego le han devuelto, siempre teniendo en cuenta el contexto inflacionista y de precios al alza.

Por otro lado, Mollinedo indica que los efectos de la inflación afectan de forma bidireccional. En el caso del Estado, «ingresa una cantidad que se ve reducida» ya que también tiene que hacer frente, entre otras cosas, a la revalorización de las pensiones, insumos hospitalarios... A pesar de que afecta a ambas partes, el técnico de Hacienda incide en que, al igual que todo, «estas situaciones como la inflación afecta más a quien menos tiene ya que el Estado tiene una gran capacidad de recursos para hacer frente a los distintos pagos».

Ante este hecho, Mollinedo explica que para optimizar al máximo el borrador de la Renta es importante no confirmarlo sin más y fijarse en qué deducciones se pueden obtener. Indica que solo en los primeros días de la campaña de la declaración de la Renta, 700.000 personas acordaron con la Agencia Tributaria sus devoluciones.

Esta 'necesidad' de devolución rápida se da todos los años. Sin embargo, Mollinedo explica que sucede porque la amplia mayoría de la población contribuyente no son expertos fiscales y no son conscientes de todas las deducciones que se puede aplicar. Por ello, la recomendación es que «junto con el borrador se descarguen la guía de la declaración de este año y se lean el índice punto por punto para ir a los apartados de los que se pueda beneficiar».

Por lo tanto, que la declaración salga a pagar no es malo en sí mismo ya que el contribuyente habrá disfrutado de unos ingresos que pudo gastar conforme al coste de vida de ese momento. Asimismo, en este sentido, señala el técnico que «el valor de la Renta siempre es sobre las retenciones por lo que cabe pensar que estas son proporcionales» y se cobran o se pagan en tiempo y forma.

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