Hasta 300.000 €: se traduce en el retorno del 45%.
Más de 300.000 €: el contribuyente tendrá que desembolsar el 47%.
Teniendo en cuenta esto, quien reciba la máxima cantidad disponible para estas ayudas (7.000 euros), tendrá que devolver entre unos 1.330 y 3.290 euros, dependiendo del nivel de ingresos que certifique. No obstante, si la declaración sale a pagar, el contribuyente podrá aplazar la devolución o fraccionarla para su mayor comodidad.
Sin embargo, según explican desde Faconauto, los descuentos que llevan a cabo los concesionarios y los fabricantes de automóviles están exentos de tributación, ya que se tratan simplemente de rebajas comerciales. En este caso, el usuario no tendrá que preocuparse por devolverlos a las arcas del Estado.