De hecho, Hacienda prevé poner el foco en las nuevas declaraciones de criptomonedas que se presentarán por primera vez este año con los datos de 2023. Aunque este plan afecta en su mayoría a grandes empresas, existe una sección exclusiva para los autónomos y los pequeños negocios, los cuales ya saben que la actividad inspectora se centrará sobre algunos colectivos específicos.
¿Qué autónomos sufrirán más inspecciones de Hacienda?
"La mayor novedad para este ejercicio es la creación de una campaña de avisos específica para alertar de irregularidades detectadas en las declaraciones de IRPF. Más allá de esto, el resto de claves que afectan a los autónomos consisten en ahondar en directrices que ya estaban en años anteriores, como por ejemplo la vigilancia en sectores y modelos de negocio en los que se aprecie alto riesgo de existencia de economía sumergida por su mayor uso de efectivo". Así lo explicaba José María Mollinedo, secretario general del sindicato de técnicos de Hacienda.
En los últimos años, se ha puesto especial atención a algunos sectores como el comercio, la hostelería, los asentadores o también la construcción y las pequeñas reformas. Mollinedo asegura que se prestará especial atención a las pequeñas sociedades que declaran durante varios ejercicios bases imponibles negativas o aquellas que presentan poca actividad.
Estas situaciones se suelen producir en casos en los que estas sociedades se usan para simular gastos y aprovechar deducciones. Ahora, Hacienda informa de cuáles serán los tipos negocio y las actuaciones que más se vigilarán durante el año 2024 para perseguir la economía sumergida y aquellos que utilicen métodos electrónicos de pago radicados en el extranjero para eludir el suministro de información.
- Los negocios que no admitan pagos por medios bancarios.
- Los negocios cuyas rentas se obtengan de entregas de bienes o prestaciones de servicios directamente realizados al consumidor final puesto que se incrementan los riesgos y la falta de control en cuanto a las formas de pago.
- Los negocios cuyos signos externos de riqueza, patrimonio, rentabilidad o información financiera sean incoherentes con las rentas declaradas.
Como decíamos anteriormente, los negocios que cumplen con estas características suelen ser los comercios, la restauración, el sector terciario, las actividades inmobiliarias, las reformas y arreglos o la construcción. Por su parte, Hacienda confirma que un año más se mantendrán las entradas en domicilios sociales de negocios y se incidirá en las entidades artificialmente creadas para generar facturas falsas y sobre los bienes ocultos detrás de la actividad propia de fundaciones.
El Ministerio Público pretende llevar a cabo actuaciones para mejorar el índice de cumplimiento voluntario de los autónomos y para ello ampliará las campañas de avisos del IRPF y se facilitará especialmente la navegación por Renta Web para presentar la declaración complementaria de la manera más ágil posible.
Por último, Hacienda seguirá con su propósito de simplificar el lenguaje en los documentos que más tengan que utilizar los contribuyentes como son los acuerdos de aplazamiento y las providencias de apremio. También se mejorarán las diligencias de embargo mediante el sistema de solicitudes de cita telefónica y con un nuevo servicio de chat para agilizar el proyecto.