NOTICIA 31.01.2022 - 19:31H
La Agencia Tributaria (AEAT), dependiente del ministerio de Hacienda, aplicará técnicas de análisis del comportamiento a los contribuyentes para facilitar los trámites y perseguir el fraude y trabaja con las organizaciones de pymes y autónomos en "soluciones digitales" para detectar estas prácticas fraudulentas y facilitar obligaciones como informar de la facturación.
El Gobierno creará un grupo de trabajo para aplicar técnicas basadas en una iniciativa de la OCDE que pretende "descubrir cómo los humanos toman decisiones verdaderamente", y que combina enfoques psicológicos, cognitivos. Este método se aplicará para tratar de mejorar la comunicación con el contribuyente y las aplicaciones informáticas de la AEAT.
La AEAT también redoblará sus esfuerzos para detectar perfiles de contribuyentes que potencialmente podrían incumplir con sus obligaciones. "Se habla de esos análisis de comportamientos para facilitar en la gestión y como instrumento para perfiles de riesgo, que conllevarán actuaciones de comprobación. No es nuevo, ya el pasado año se hablaba de ello", explica a este periódico Carlos Cruzado, presidente de Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha).
Otro de los pilares del plan de control tributario de la AEAT es la lucha contra la economía sumergida. En este apartado Hacienda pretende aportar "soluciones digitales" para evitar las ocultaciones de ventas y a la vez facilitar los trámites de notificar la facturación y registro. Todo ello con cargo a los fondos europeos. Aunque el documento no lo especifica, desde Gestha, el sindicato de técnicos de Hacienda, sostienen que, aunque esta medida "va dirigida a todas la sociedades profesionales y empresarios, tiene más incidencia en autónomos y pequeñas sociedades".
Hacienda pretende impulsar también las personaciones en sedes de empresas para combatir "conductas insolidarias" y mantener el denominado 'plan de visitas', con la vista puesta en los denominados 'nidos de empresas' o coworkings. El foco estará puesto también en sectores con alta circulación de dinero en efectivo, con subcontrataciones frecuentes o en las empresas que se sospeche que se contrata a falsos autónomos.
Para este ejercicio, la Agencia Tributaria ha desarrollado un sistema automatizado para detectar empresas que desvían beneficios a paraísos fiscales. Este mecanismo es capaz de detectar precios de transferencia fraudulentos e identifica pautas de comportamiento de alto riesgo fiscal. Los precios de transferencia son los importes que empresas de un mismo grupo pagan por intercambiar bienes y servicios entre ellas. Fijar unos precios de transferencia anormalmente bajos para inflar los beneficios de las filiales en paraísos fiscales o territorios con baja tributación es una conocida técnica de evasión fiscal.
Además, desde este año Hacienda cuenta con información de 2021 de las empresas españolas que tributan en paraísos fiscales sin tener una actividad sustancial en ellos. Uno de los criterios que la OCDE emplea para considerar que una empresa se está beneficiando de un paraíso fiscal es precisamente su presencia en ese territorio pese a no desarrollar una actividad económica sustancial.
Hacienda tiene puesto el foco también en el comercio y la economía digitales. En este apartado, preocupan las empresas que no están domiciliadas en España, pero que sí están obligadas a tributar por IVA por las ventas que realizan a consumidores españoles, como es el caso de gigantes como Aliexpress o DHgate.
Con la implantación del mínimo del 15% en el impuesto de Sociedades a partir del año que viene, la Agencia Tributaria volverá a fijarse en los contribuyentes que declaran reiteradamente pérdidas, compensaciones y deducciones en este tributo que grava los beneficios de las empresas.
En este sentido Hacienda hace hincapié en el fraude en las Agrupaciones de Interés Económico, un tipo de sociedad mercantil que en ocasiones se emplea de forma ilegal para evitar pagar IRPF. Este fue el sistema que emplearon supuestamente Imanol Arias y Ana Duato para defraudar al fisco entre 2010 y 2014.
Finalmente, la Agencia Tributaria estará muy pendiente del flujo de importaciones que lleguen del Reino Unido tras su salida de la Unión Europea. El objetivo es evitar que haya empresas que se beneficien fraudulentamente de las llamadas "preferencias arancelarias" en el comercio entre ambos bloques. El acuerdo comercial entre Reino Unido y la UE tras el brexit establece que no habrá aranceles al comercio para las mercancías cuyo origen acreditado sea uno de los dos socios.
En el ámbito de la lucha contra el narcotráfico, Hacienda fija el Campo de Gibraltar como zona prioritaria de actuaciones contra el tráfico de drogas y reforzará el control de las narcolanchas.